Luego de algunos días en los que estuve bastante ocupado, vuelvo a darle continuidad a este blog. Y es que, en el mundo de los PLC’s, nunca se sabe qué puede pasar: hay jornadas tranquilas, donde todo marcha bien, y otras en las que parece que todo se confabula para sacarte de quicio.
Los días tranquilos y los días complicados
Hay días en los que las máquinas trabajan en armonía, sin fallas, y uno cree que ya tiene todo bajo control. Pero también existen esos días nefastos en los que:
-
Un equipo que funcionaba perfectamente, de repente ya no quiere arrancar.
-
Una máquina crítica presenta fallas recurrentes que parecen no tener causa aparente.
-
Para empeorar la situación, el problema ocurre en sábado por la noche, sin posibilidad de conseguir refacciones.
En esos momentos, todo lo demás pasa a segundo plano: comida, descanso o pendientes personales. El tiempo se convierte en una carrera detectivesca contra la falla. Cuando apenas logras medio resolverla, ya otro equipo está esperando su turno para reclamar atención. Este ciclo puede repetirse una y otra vez, dejando poco espacio para otras actividades… incluso para escribir en este blog.
Aprender de cada máquina
La experiencia con cada máquina es única. Al trabajar de cerca con equipos de distintas plantas, dedicándoles horas o incluso días, uno termina adentrándose en sus particularidades. Con el tiempo, esto permite reconocer patrones y aplicar lo aprendido en situaciones futuras.
Sin embargo, no todas las máquinas son iguales:
-
Si fueran todas idénticas, bastaría con dominar una para dominar todas, lo que facilitaría mucho el trabajo.
-
Pero la realidad es otra: difieren en operación, cableado, control, mecánica, hidráulica, comunicaciones, etc. Esto implica que lo aprendido en una no siempre aplica en otra, haciendo que el proceso de aprendizaje sea más largo… aunque también más enriquecedor.
Diversidad de tecnologías
En mi día a día me toca atender desde equipos muy viejos hasta máquinas de última tecnología. Algunas son sencillas, otras extremadamente complejas. No todas fabrican lo mismo, ni utilizan los mismos controles, ni incorporan los mismos PLC’s. Incluso cuando parecen similares, cambian por detalles como:
-
Funciones específicas para una línea de producción.
-
Diferencias en el cableado eléctrico.
-
Nuevas CPU’s o tarjetas añadidas.
-
Modificaciones en el programa para mejorar la eficiencia.
De cada una, sin importar su edad o complejidad, se aprende algo nuevo.
El propósito de este blog
Todo lo que voy aprendiendo en este mundo de la automatización lo plasmo aquí. Habrá días en los que esté ausente por estar ocupado resolviendo problemas, pero siempre volveré para compartir lo aprendido.
Aclaro que, aunque llevo varios años en este campo, no me considero un experto absoluto. La tecnología evoluciona a diario: aparecen nuevos PLC’s, sensores, tarjetas, redes, softwares, etc. Nadie puede abarcarlo todo.
Este blog no pretende ser un curso de PLC’s ni un manual técnico exhaustivo. Para eso existen los cursos especializados, que recomiendo ampliamente. Lo que sí encontrarás aquí son:
-
Definiciones de términos poco comunes.
-
Procedimientos básicos paso a paso (respaldar un programa, configurar una tarjeta, crear bloques de datos, parametrizar un variador, etc.).
-
Experiencias reales que pueden servir como orientación en situaciones similares.
Para concluir...
La finalidad de este espacio es sencilla: registrar mis experiencias, porque los detalles se olvidan con el tiempo. Y quizá lo que aquí quede escrito sea útil para alguien más… o incluso para mí mismo en el futuro, cuando enfrente de nuevo una falla en algún rincón de una planta.
0 comentarios:
Publicar un comentario